lunes, 18 de febrero de 2013

LA VUELTA DE OBLIGADO


Obligado no tuvo mas remedio. Y fue sin mas demora a la farmacia. Pero surgió un inconveniente: éstas no existieron con ese nombre hasta mucho tiempo después. Motivo por el cual se vio Obligado dentro de una máquina del tiempo, transportándose a principios del siglo XX.
Ya en una farmacia se preguntó que cornos hacía allí. Fue ahí donde se dió cuenta de que era manipulado por el escritor de un blog, que desde el año 2013, sin tener algo interesante que escribir, decidió tomar a este personaje, Obligado, y desandar la falta de creatividad e inspiración por las sendas excesivamente recorridas del sin sentido.
Triste al reconocer su total dependencia de este narrador omniciente, aprovechó el momento en el que estaba y el lugar a donde había sido literariamente traladado.
- Oiga - dijo Obligado - ¿tiene algo pa' levantar el ánimo?
- Si, mire, vea. Esto llegó desde Munich.
- ¿Y como es la cosa?
- Agarra el dedo índice y el pulgar, toma un poco de la sustancia, así como ve que hago yo,  después se los lleva a una de las narinas y de ahí pa' adentro - se escuchó un sonido ronco proveniente de las inmediaciones de la cara del farmacéutico.
- Mire que moderno. ¿Y esto hace mal? - preguntó Obligado
- Ya lo decían los griegos, lo que no mata fortalece...
- Pero vea que sabios los griegos. Deme un frasquito.
Así fue como Obligado comenzo su adicción. Si bien el ánimo se levantó, luego volvió a caer y así había que levantar y levantar y levantar...
En ese estado de delirio paranoico y bajo el efecto de también del alcohol, entró de nuevo en la máquina del tiempo sin rumbo conocido. Adentro de la misma, realizaba sucesivas incorporaciones del estimulante, hasta que no hubo más. Por suerte para él, llegó justo a una farmacia en pleno centro de Córdoba, así que como una flecha abrió la puerta del local y balbuceando como si tuviera una papa en la boca, hizo su pedido.
- Deme'sto... - y le dio bruscamente el frasquito.
El farmacéutico lo miró con temor, sobre todo por sus ropas bastante demodé para la usanza de la época. Tomó el recipiente lo abrió y lo olió.
- Voy a tener que informar a las autoridades...
- ¿Qué? dijo Obligado - las mías son legales...
- No según la Ley Provincial 10.067
- ¿En que año estamos?
- 2013
Y antes que pudiera decir otra cosa, salió corriendo Obligado hacia la máquina del tiempo, puso fecha 1845 y nunca más se lo vió por una farmacia. A partir de ese hecho se conmemora la Vuelta de Obligado, todo un ejemplo para los que dicen que la droga es un camino sin retorno.


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